lunes, 7 de julio de 2008

Ingrid Betancourt y sus compañeros fueron liberados por las FAC en una exitosa operación de rescate


Libres al fín


Eran las cuatro de la mañana y el sol todavía no salía. Ingrid Betancourt se despertó una vez más en la peor de sus pesadillas. Agarró su rosario y empezó a orar. Más de seis años de encadenamiento no habían acabado con la esperanza de que algún día ella y sus compañeros pudieran ser liberados.
Pasaron algunas horas y el Comandante Asprilla les hizo empacar. Estuvieron esperando todo el día, no sabían qué. El Comandante le dijo a Ingrid que todos subirían a un helicóptero con rumbo desconocido para hablar con alguien muy importante y luego ser trasladados a un sitio en el que su cautiverio sería mejor. “Ahí se nos rompió el corazón.” De pronto, el ruido de la nave hizo que Ingrid mirara al cielo “Que curioso es sentir felicidad oyendo un helicóptero si cada vez durante siete años el mismo ruido nos hizo sentir miedo”. Esta vez eran helicópteros blancos. Los 15 rehenes cruzaron el río, todos con un guerrillero armado al lado que los apuraba. De las naves salieron unos hombres. “¿Esta gente quién es? ¿Qué comitiva internacional es esta? ¿Será que nos van a volver a poner de payasos en otro nuevo circo? Yo no quiero prestarme para esto” pensó Ingrid. Mientras estos hombres hablaban con los mandos, ella se percató de las figuras del Che Guevara que tenían en la ropa y pensó que eran de las FARC. Después les ordenaron subir al helicóptero pero esposados, la frustración embargaba una vez más a los rehenes. El helicóptero tomó vuelo. De pronto, Ingrid vio al comandante que tanto dolor les hizo sentir. Fue entonces que el jefe de la operación dijo: “Somos el ejército nacional, están en libertad”. Saltaron, lloraron, se abrazaron. Ingrid y sus compañeros no lo podían creer. “Dios nos hizo este milagro”
Después de unas horas de viaje, Ingrid salió del avión y bajo toda la luz de los flashes pudo finalmente abrazar a su madre como hace años no lo hacía.

1 comentario:

Eloy Jáuregui dijo...

Estimada Stephanie:

No sabes cuánto espero que el curso te haya servido para mejorar tu escritura. Discúlpame por las bromas pesadas y estudia para el FINAL que viene complicado. Y no te olvides de tu profesor. Suerte

NOTA TAREA ACADÉMICA : 17

Eloy